Esta bonita planta llena de color la navidad en hogares, comercios, empresas, y sobre todo en nuestras calles. La Poinsettia, más conocida como Flor de Pascua, tiene una gran tradición que pocos conocen. ¿Sabes cuál es el por qué de su fama? ¿Porque es la planta perfecta para las fiestas navideñas?
La leyenda de la Flor de Pascua.
Una vieja leyenda cuenta, que durante las navidades unos niños mexicanos acudieron, como era tradición, al belén de la ciudad para ofrecer un regalo al niño Jesús. Sin embargo, como no tenían recursos decidieron coger de un jardín una de estas flores para entregársela. Al llegar a la Iglesia, Dios quedó absolutamente conmovido por el gesto y decidió teñir la planta de rojo, dándole así la importancia que merecía.
La verdadera historia de poinsettia
La verdadera historia de por qué esta planta es tan buscada en Navidad es muy diferente. En el siglo XVI un fraile franciscano de Taxco de Alarcón (en México) empezó a decorar su iglesia con estas plantas debido a su colorido. Poco a poco se fue popularizando la decoración de los belenes con su bonito colorido rojo, entre 1521 y 1821.
Joel Roberts Poinsett
Embajador de los Estados Unidos en México, durante sus cuatro años en el cargo se llevó varias de esta preciosa planta a su país, dando a conocer en tierra norteamericana el gran esplendor de la flor de pascua.
Tan popular se hizo, que el 12 de Diciembre de 1991 se estableció el “Día de la Poinsettia” como homenaje a la muerte de este botánico.
Cuidados para que la flor de Pascua dure todo el año
La puedes colocar tanto fuera como dentro de casa.
Lo primero que debemos hacer al llevarla a casa es desembolsarla, ya que suele venir con bonitos adornos de plástico, y así favorecer la aireación y evitar la caída prematura de las hojas. Si la vas a colocar dentro de casa, procura buscar un sitio alejado de calefacción, y poca luz. El riego debe ser bajo el grifo, y una vez haya drenado todo el agua retirar el agua sobrante del plato sobre el que colocamos la maceta. No hay una medida estándar de riego, te recomendamos regarla cuando la humedad de la planta sea solo en la parte más inferior de la maceta.
Consejo de Floristería La Rosaleda: intenta regarla en la fregadera, o en la ducha, dejando escurrir el agua sobrante del sustrato, si es con agua de lluvia o de grifo reposada 24 horas mejor. Si usas agua potable, te recomendamos dejarla en un recipiente durante un día o más de reposo, para que el cloro que se usa para su potabilización y tanto perjudica a las plantas en general se evapore.
Caída de hojas en Poinsettia o flor de Pascua
Cuando van pasando los días, podemos ir retirando aquellas hojas que presente síntomas de marchitamiento. Deben de desprenderse con facilidad. Si tiras de ellas y les cuesta soltarse del tallo, es mejor dejarlas hasta que prácticamente se caigan por sí solas.
Floración y poda de Poinsettia o flor de pascua
El momento idóneo de floración como poda para la Poinsettia es la primavera, ya que comienza a florecer cuando la noche es más larga que el día. De cara a la primavera cuando los días empiecen a ser mucho más largos y las temperaturas más cálidas, ya la podemos sacar al exterior o plantar directamente en el jardín. Si deseamos trasplantarla a una maceta mayor, el mejor momento es de cara a la primavera, más adelante te contamos como transplantarla con seguridad.
¿Como realizar la poda? Se realiza con tijeras, eliminando sus zonas florales y cortando las ramas a unos 4 ó 7 centímetros del tallo, siempre sobre un centímetro por encima de una hoja o yema. Si esta yema está orientada hacia el exterior de la planta, mucho mejor ya que tras su brotación, la nueva rama crecerá mejor que si lo hace hacia el interior.
La Brotación de nuestra flor de pascua, será como una planta arbustiva y lo hará así durante toda la primavera, verano y principios de otoño. A partir del mes de octubre, con los días ya más cortos, paralizará su desarrollo vegetativo y comenzará su inducción floral.
Transplante
El trasplante no debe de preocuparnos hasta que dé comienzo la primavera, aunque en invierno esté en plena floración, la verdad es que se encuentra en un periodo de bastante reposo en cuanto a desarrollo. Si has comprado tu Poinsettia a finales de noviembre o durante el mes de diciembre, lo que debemos hacer es simplemente disfrutar de ella, con unos cuidados básicos para que pase todo el invierno lo mejor posible.
Entre los meses de marzo y abril ya podemos trasplantarla a una maceta más grande. Para ello elegiremos una maceta, entre 4 y 8 centímetros más de diámetro. Entre los sustratos recomendados están el sustrato para plantas de interior y el sustrato universal ambos turbosos y muy bien fertilizados. Aprovecha el transplante para podar sus ramas a unos 10 cm del suelo, como para estas fechas el tiempo ya ha mejorado notablemente, incluso puedes sacarla a la calle o jardín para que brote con esplendor convirtiéndose en un estupendo arbusto.
Una vez podada, la retiramos de la maceta vieja, ponemos un poco de sustrato en la nueva maceta, depositamos la Poinssetia en su interior procurando que el nivel de plantación quede a no más de dos centímetros de profundidad. Añadiremos el nuevo sustrato rellenando sin apelmazar el perímetro del cepellón y seguidamente procederemos a darle un buen riego.
Donde la dejes, evita moverla del sitio para que crezca aclimatada a él. A las dos o tres semanas comenzará a brotar como un arbusto y así lo hará hasta finales del mes de octubre, momento en el que veremos que comienzan a ponerse de color nuevamente sus brácteas, hasta estar perfectamente florida entre finales de noviembre y principios de diciembre.
Si has decidido plantarla en el jardín, ten en cuenta que es una planta de exterior pero las bajas temperaturas y heladas pueden dañarla hasta morir. Si está protegida y pasa el invierno dentro de casa o el clima no es tan frío, en el jardín crecerá como un arbusto.